viernes, 1 de febrero de 2013


Bombillo, toque y gol 
Emelec al rival le lleva una ventaja: manda sobre la pelota. Juega vertical porque los arcos no están a los costados. Construye un estilo alrededor de la tenencia del balón, por momentos tan abrumador que logra darle fluidez a su juego.
Se pierde la posesión y hay diez azules presionando, tres basculando encima del que lleva la pelota; es un agobio, que le exige al rival a jugar a un toque. No puede girar,   no hay tiempo para pensar. Doble pivote delante de la línea de cuatro, uno posicional (Pedro Quiñónez), y otro de recorrido que llega a la segunda jugada (Wila), ambos borran a los adversarios que se meten entre líneas. Giménez como lateral, tercer pivote o falso interior defensivo. Tapa todas las salidas; el paraguayo crea espacios y pone pases orientados. Ante U. Católica sacó un remate alucinante que tocó Espinoza y se metió en el arco como zarpazo mortal.
Emelec maneja su propio credo futbolístico: Jerarquía para imponer su método y aplicar su sello. Los individualismos no tienen lugar donde prevalece la construcción paciente y la búsqueda constante de pequeñas sociedades.
Siempre existe alguien de azul que llega antes. Que anticipa. Que toca antes. Uno que tapa el despliegue rival, otro que espera, todos bloquean en duelos de 1x1. Y el anuncio del fuera de juego que amenaza, donde José Quiñónez y Achilier tienen la fe que pesa más que los defectos.
La clave de Emelec está en saber dónde recuperar el balón y qué hacer cuando lo haga. Marcos Caicedo le busca la espalda al defensa, va al primer palo y de pronto corta y va al segundo o al revés y pierde al defensor de vista, llega y gol de cabeza (el primero a U.Católica).
Mondaini asiste a un toque, si la pelota viene por la derecha, él gira y se va por el otro lado. Entonces llega el pase y zas, la mete.
La virtud de Marlon: que los defensas nunca lo ven cuando va a la contra. Arma bien el pie: va rápido y define lento. Tiene el hábito de mirar primero y cuando arranca ya ganó: dos goles a U. Católica.
Ab. Roberto Bonafont - @robertobonafont
COLUMNISTA

Romario Caicedo

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