viernes, 4 de mayo de 2018
El cerebro del equipo es el sistema
A la eficacia se llega por distintos caminos. Liga tiene orden y reparto claro de los espacios y funciones. Aquello facilita tenencia de la pelota. Para buen manejo de balón debe regir un buen posicionamiento.
Una pérdida del esférico en la mitad del campo es gol. Si el adversario presiona se va por fuera, la pérdida por fuera es menos peligrosa que la pérdida de balón por dentro.
Si el central recibe la presión del rival, cambio de frente del central y cambio de ritmo del lateral. Liga tiene movilidad para salir de la presión. Movilidad es el trote constante más desmarcación que es el cambio de ritmo y cambio de dirección.
Acomodar la defensa cerca de la mitad de la cancha es exponerse a la velocidad del adversario. Se la ubica de acuerdo a las virtudes de los volantes y delanteros, si estos son agresivos y capaces de presionar en el último cuarto de cancha para recuperar la pelota, se puede arriesgar poniendo la última línea un poco más afuera, pero si los volantes y delanteros no tienen capacidad de recuperación pos pérdida se debe jugar con la defensa bien atrás.
Una cosa es recuperar la pelota, otra diferente es defenderse.
Laterales como iniciadores del juego, son soportes para los volantes, sino estos no pueden jugar vertical por el eje. Los laterales también son apoyo para el enganche y el nueve de área si no logran jugar corto. Lanzando desde las orillas o cortándose hacia el interior en diagonales profundas, acompañan el crecimiento, la evolución de la jugada.
Los puntos de giro en el guión de Repetto: Intriago recupera más, Orejuela organiza mejor, y hace labor de desgaste que favorece a los atacantes. Mérito del medio campo, y mérito del entrenador que ha agilizado los comportamientos colectivos.
Anderson Julio ejecuta rápido en carrera, luce en grandes extensiones del campo y no se apaga en espacios reducidos. Hace movimientos de extremo y de pivote defensivo cerca de Orejuela.
Johan Julio es potente y posee velocidad sostenida. Juega simple y la simpleza le vuelve directo. Rodríguez se mueve con ingenio y domina el claro. Controla la pelota sabe medir, esconderla y salir con finta para rematar al arco.
Cuando Barcos recibe en el área detiene el reloj.
Sus compañeros lo encuentran sin mirarlo.
Le gana un segundo a la jugada y si tiene una ocasión la mete.
AB. ROBERTO BONAFONT - @RobertoBonafont
COLUMNISTA
Romario Caicedo
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